1. Crear un plan para cada canal de redes sociales
Si no planificas correctamente, tu plan no prosperará. Muchas empresas cometen el error de incorporar a ciegas el marketing en redes sociales sin una estrategia o un plan.
Si no puedes responder preguntas como “¿por qué estás en las redes sociales?” o “¿en qué plataforma de redes sociales se encuentra tu audiencia objetivo?” entonces es momento de presionar el botón de reiniciar. Comienza a redactar un plan junto a tu equipo para que puedan usar de referencia cuando así lo necesiten.
Tu plan de redes sociales debe constar de miniplanes para cada canal de redes sociales en el que esperas tener presencia. Tendrás un plan para Twitter, Facebook, entre otros.
Si estás comenzando, tendrías que trabajar en tres sitios de redes sociales o menos. La mayoría de las empresas, especialmente las empresas pequeñas, que intentan administrar cinco cuentas de redes sociales diferentes generalmente terminan realizando un trabajo mediocre con pocos o ningún resultado.
2. Publicar regularmente
Publicar un tweet por día no marcará la diferencia. Algunas plataformas como Instagram y Snapchat no se mueven necesariamente tan rápido como Twitter o Facebook. Es decir, no es necesario que publiques con tanta frecuencia. No obstante, debes desarrollar un cronograma de publicaciones de rutina y debes ser consistente.
Esto se relaciona con tu plan de marketing en redes sociales. Debes decidir lo siguiente:
- Con qué frecuencias vas a publicar en cada canal de red social
- Qué tipo de contenido vas a publicar
- Las redes sociales influyen en el cronograma de publicaciones (comunicarse con los influenciadores a través de redes sociales)
Ten en cuenta que tus seguidores posiblemente sigan a cientos o incluso miles de otras personas. Si no publicas nuevo contenido con la frecuencia que lo hacen las otras cuentas, es fácil perderse y quedar en el olvido.
3. Ser cuidadoso a la hora de compartir
Cuando llega el momento de decidir qué compartir en redes sociales, la calidad supera a la cantidad. Debes publicar contenido de manera consistente, pero también debe ser valioso. El contenido de calidad es:
- Relevante para tu público
- Útil
- Entretenido
Una tendencia que se está volviendo popular y de la que debes tener cuidado es recurrir a herramientas que “sugieren” contenido que puedes compartir con tu audiencia. A veces las sugerencias son aceptables, pero la mayoría de las veces terminas con mucho contenido sugerido que no es muy relevante o de alta calidad.
El funcionamiento de estas herramientas generalmente se basan en palabras clave y en las fuentes de actualizaciones de datos. Por ejemplo, si estás buscando contenido relacionado con “marketing de contenido”, tus resultados pueden incluir sugerencias como esta:
Si no tuviste tiempo de verificar las sugerencias y solo realizaste las publicaciones a ciegas, es posible que estés compartiendo contenido que no sea tan útil para tu público. Esfuérzate por compartir el mejor contenido, no solo lo que esté inmediatamente disponible.
Una manera de tener una fuente estable de contenido fresco es crear una lista de sitios de tu industria o nicho que sabes que publican contenido de alta calidad.
4. Usar una herramienta de gestión en redes sociales
Si estás usando las plataformas nativas de publicación para Facebook, Twitter y Linkedin, estás perdiendo tiempo y eres menos productivo. Las herramientas de redes sociales como Sprout Social facilitan mucho:
- Publicar contenido en plataformas múltiples
- Programar publicaciones por adelantado
- Colaborar con tu equipo
- Consultar todas las fuentes de noticias sobre redes sociales desde una sola plataforma en vez de iniciar sesión en cinco sitios diferentes.
- Rastrear y medir tus resultados
Usar una plataforma de redes sociales ofrece muchos otros beneficios y esas instancias por separado son más que suficientes para dar el primer paso. El usuario casual puede administrar sus redes sociales desde sus teléfonos, pero como empresa, necesitas una herramientas que te permitirá ser más eficiente y estratégico.
5. Publicar más imágenes
Los resultados han demostrado que las fotos son el tipo más popular de contenido en redes sociales para generar interacciones y participación. Las fotos son las imágenes que más se comparten en Facebook.
También son las que se retweetean en Twitter.
El ejemplo más evidente del poder de las imágenes en redes sociales son sitios como Instagram y Pinterest, que son impulsados principalmente por imágenes. De hecho, Instagram logra la mayor interacción en comparación con cualquier otro canal de red social. No es casual que tanto Instagram como Pinterest pudieran ganar muchos adeptos y obtuvieran más éxito que cualquier otras redes sociales que fracasaron.
Agregar imágenes a las publicaciones de redes sociales nunca ha sido más fácil. Las herramientas como Canva y Landscape te permiten crear imágenes con tamaño perfecto que se adaptan a la mayoría de los canales de redes sociales. También puedes hacer cosas como usar imágenes para eventos futuros, tomar fotos de la empresa y diseñar otras tareas con imágenes para publicar y así lograr mayor visualización con tu contenido.