Un producto o servicio innovador es aquel que cumple con 3 criterios importantes: propone la solución a un reto o problema, utiliza un componente novedoso (en comparación con lo que ya existe o inaugura una nueva categoría de producto o servicio) y aporta valor a las personas que lo utilizan.
Entonces un producto innovador no necesariamente implica una mejora en el material con el que está hecho, ni características muy llamativas o costosas, sino que resuelve un problema y aporta mucho a la vida de quienes lo usan.
5 características de un producto innovador
1. Es relevante para los consumidores
Es decir, que responde a las necesidades de un segmento del mercado que se investigó antes de la creación del producto.
2. Se distingue de la competencia
Tiene uno o más componentes que lo diferencian del resto de la competencia y, por lo tanto, posee ventajas sobre lo que ya existía. Para ser innovador, el producto o servicio debe demostrar en qué aspecto ofrece mayores beneficios.
3. Es fácil explicar sus ventajas y novedades al público
Aun cuando sea necesario aprender a utilizar funciones o procesos una vez que se compra el producto, lo más importante queda claro para los consumidores: ya sea la rapidez, la eficiencia, la compatibilidad con otras herramientas para mejorar el trabajo, etc.
4. Es sencillo probarlo
Existen algunas historias desafortunadas de productos que apuntaban a la innovación, pero que no pudieron trascender de esa manera, porque la gente no tuvo éxito al probarlos la primera vez. Por eso no se convirtieron en la primera solución para el problema específico que intentaban resolver.
5. Tienen su marco legal en orden
Esto involucra tanto el registro de patentes y marca registrada como los permisos necesarios para su comercialización y uso. De nada sirve lanzar un producto innovador si las leyes locales o federales no consideran adecuado utilizarlo, ya sea por razones de seguridad, sanidad o licencias.
Los productos innovadores dependen mucho de su contexto. Tal vez ahora un libro impreso parece algo sumamente común, pero cuando se inventó la imprenta de tipos móviles y se comenzaron a producir ejemplares a mayor velocidad, el libro fue uno de los avances tecnológicos más importantes del siglo XV.
Mencionamos esto para ilustrar que los productos innovadores no surgen de manera espontánea, quizá no son sencillos de crear, pero su creación no es exclusiva de genios como Nikola Tesla y millonarios como Bill Gates. Por eso te vamos a compartir algunos consejos que te ayudarán a crear la siguiente innovación para tu negocio y, con suerte, para el mercado e industria en el que te desarrollas.
¿Cómo crearlo?
- Haz un estudio de mercado.
- Encuentra oportunidades en el mercado.
- Organiza una lluvia de ideas.
- Selecciona las ideas basándote en sus ventajas.
- Empata las ideas elegidas con el público objetivo.
- Investiga a tu competencia.
- Define las características de tu producto innovador.